Camila se llama a sí misma HAMMILA , arrastrando la eme e insinuando tan poco la C inicial que se queda tan muda como una hache. Eligió este vestido porque es muy coqueta y salimos de parques y cayeron estas fotos. Muy guapa y con carácter. No duda en soltarle la mano a cualquiera que amenace su espacio mental o vital; y aunque el hermano le aguanta todo, tampoco duda en hacerle blanco de pellizcones o tiradas de pelo (enseñanzas de la dura lucha por la vida en la guardería). Anoche, sin ir más lejos, echó a su hermano de su propia cama para dormir en ella y el pobre amaneció en la nuestra y muy confuso pues en medio de la noche recibió golpes y empujones y optó por seguir la velada en otro catre... Con todo, se adoran mutuamente y rara vez hay peleas ya que está claro quien es el que manda de los hermanos: HAMMMMILA!
30 de agosto de 2012
Vive en la piña debajo del mar...
Camila se subió a su mano y lo miraba entre encantada o indiferente; lo que ocurriera primero y Bob, pasmado y gigante sostenía su sonrisa tonta y la mirada, perdida en el horizonte...
4 de agosto de 2012
La calesita loca
Oliver y Camila giran alrededor de un señor que pedalea en su sitio. Bueno, contado así suena algo siniestro, pero luego ven el vídeo y es de lo mas normal...
Brita la cabrita y Camila
Aquí encontré un vídeo donde vemos a camila interactuando con brita la cabrita que se encabrita. El córnido y la infante en un entrañable encuentro de especies sin que llegue a sucederse un cornazo o embestida que tanto gustan a este tipo de seres incluso como demostración de cariño. Camila, una tigresa; hoy la acaricia mañana se la come...
Bailando en Unquera
Si hubiera una música de las recientes vacaciones en Asturias, ésta sería sin duda puzzy control de Prince. Oliver la descubrió y la puso y cantó o bailó unas tres mil veces. Aquí una breve muestra de su demencia...
3 de agosto de 2012
Breve de playa
Un corto vídeo de calidad media obtenido con la cámara de fotos; más fáciles de colgar, más cortos de visualizar...
La matavieja, una cabrita llamada brita y otros recuerdos pixelables
En la casa donde estuvimos alojados este año había muchas cosas normales que no enumeraré; luego estaban los caminitos y poblaus; sitios extraños y nominados que hasta tienen cartel. La matavieja es un caserío de esa casa que se ve ahí; otra que está enfrente, y una cochambrosa cabaña de aperos que languidece entre hortigas en flor.
Este acantilado, su luminoso mar y las otras cosas que quedan claras está enfrente de una cueva que fuimos a visitar con Oliver mientras Marta y Camila aguardaban exteriormente. La cueva genial, con sus pinturas rupestres y todo eso, pero no me dejaron hacer un clic siquiera; y lo merecía. Así que me di la vuelta y le hice un tiro al paisaje ese de los que abundan a puños llenos en ese principado.
Camila monta en unos tilines accionados a fuerza sanguínea por un extranjero de nórdico aspecto. Oliver va delante y la nena no le quita ojo.
Por obvio balbuceo infantil a esta cabrita Camila le llamaba brita. Fue atiborrada a pan y otras ricuras durante varios días hasta que desapareció -ya convenientemente cebada- y quizás terminó adornando una gran olla como reina entre las patatas y cebollas; en fin, descanse en pez... (porque en esa zona las cloacas acaban en el mar)
Golpe de mar... Bueno, no pude conseguir engañar a Oliver para que una verdadera ola le meta una ducha de aquellas. Aquí vemos como se encoge por una lejana y luego señala con aparente valentía su origen...
Asturias again
Hace una semana que casi son dos que regresamos de Asturias; un viaje breve; con mucho sol para lo que puede esperarse en esas tierras y mucho para hacer. Les dejo las fotos para disfrutar, y me voy a merendar.
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