19 de abril de 2009
ARBORICOLAS
Siempre hay una primera vez para trepar a un árbol; e incluso hay una primera vez para todo, si nos atenemos a las escrituras de todas las creencias. Oliver nunca había subido por sí solo a un árbol y en esta foto tampoco hay excepción a esa norma ya que fué chiqui (el padre de Ada y quien le acompaña en la imágen) quien le izó a dichas alturas desde las que mira entre orgullo y cautela. Ya trepará por primera vez a un árbol y quizás este con una cámara en la mano para inmortalizarlo o quizás no. Valga este testimonio.
Estas fotos corresponden a un paseo que hicimos al parque del Pardo con Teo y Ada. Allí hicimos una mini acampada con bocadillos y postres para luego acabar buscando una heladería por el homónimo pueblo para satisfacer las crecientes demandas infantiles.
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