4 de septiembre de 2007



1 comentario:

Anónimo dijo...

En esta visita al canal y al río Ebro, pudimos ver cómo durante unos minutos el canal se teñía de rojo como el Río Tinto. Desconocemos lo que debieron verter en el canal, pero pronto volvió a su color verdoso habitual.

Los nenes tiraron piedras al río y se mojaron los pies en el Ebro.

Lo pasamos bien. Besiños,


Marta